Ocho años después de crearse la ruta cicloturista Danubio Ultra, el interés por este trayecto se mantiene enorme. La causa reside en la gran variedad singular de la región búlgara ribereña del río europeo,la cual sigue siendo todavía “terra incógnita” para el turismo masivo. Al circular por la biciruta, los viajeros ciclistas, van viviendo una auténtica aventura, plagada de encuentros con la naturaleza salvaje, la historia, las costumbres y la cocina tradicional de las zonas por las que van transitando.

“Hace 8 años, al comienzo sólo registramos dos pernoctaciones, en tanto que este verano, a pesar de la crisis originada por la pandemia de Covid-19, vamos a poder realizar más de 2000 pernoctaciones de ciclistas que discurren por este trayecto", augura Boris Begumov, creador del proyecto Danubio Ultra.


"Este año hemos diseñado una aplicación, Danubio Ultra, que es una guía turística que incorpora información sobre más de 350 socios. Se trata de puntos logísticos de diferente tipo, entre lugares de alojamiento, establecimientos gastronómicos, curiosidades naturales, puestos de reparación de bicis y tramos preferibles para circular por ellos. Esta aplicación es una innovación por sus características para Bulgaria, ya que ofrece al ciclista, solo o en grupo, organizar por su propia cuenta su viaje y recorrer el trayecto integral-o tramos del mismo- en una época del año de su libre elección”.

La región búlgara ribereña del Danubio es una de las más pobres y atrasadas en el país, pero encierra, en cambio, tesoros insospechados desde el punto de vista de los seres humanos y del patrimonio natural e histórico. Hay más y es que el periplo por esta zona del Danubio puede acabar transformándose en una vivencia espiritual. Es por ello que se le compara por muchos con la peregrinación por el Camino de Santiago, La Ruta Jacobea en España, en sus años iniciales y antes de acabar comercializándose y transformándose en una “trampa para turistas”. “Este es un destino exótico para auténticos aventureros”, dice Boris Begumov. La ruta ciclista Danubio Ultra depara oportunidades de ver la región en toda su gran variedad.

Los cicloturistas visitan la ciudad romana antigua de Ulpia Oescus, el barco Radetzky y disfrutan de hermosos panoramas del río desde la ciudad de Oriájovo. Se asoman a los vestigios del castro de legiones romano de Nove, en las inmediaciones de la ciudad de Svishtov, y a la fortaleza de Dimum -de los siglos I a IV antes de Cristo en Bélene-, suben a la colina en que se encuentra la fortaleza del zar Shishman, en la ciudad de Nikopol para luego tomarse un descanso en la playa de arena fina de esa ciudad. Los ciclistas que circulan por la ruta suelen parar en los museos, tratar con los lugareños, admirar los hermosos templos a orillas del Danubio.

“Pueden degustar platos típicos de la gastronomía local, en la que ocupa un puesto muy específico la sopa de pescado, que en diferentes localidades ribereñas se prepara de manera distinta -dice Boris Begumov. Pueden degustar platos a base de pescado del Danubio, elaborados en base de recetas distintas”.

Por tradición, cada verano grupos de entusiastas de Bulgaria, Rumanía y otros países, participan en hacer en conjunto la popular travesía ciclista. Este año la VIII edición de la vuelta ciclista Danubio Ultra comenzará el 3 de septiembre en la ciudad de Vidin.



La idea de los organizadores apunta a promocionar el trayecto y a las 111 localidades por las que cruzará. Los participantes más jóvenes procurarán recorrer pedaleando la distancia de 700 kilómetros en menos de 48 horas, pero los grupos principales de los ciclistas irán recorriendo en trayecto con un horario que comprenderá de 5 a 10 días calendarios. Y, una sorpresa: por primera vez se sumará a la aventura Danubio Ultra un equipo rumano que irá en bicicletas tándem.

Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: dunavultra.com