“Tiempos de fe, esperanza y amor. Y de ausencia de sabiduría”, así define a los años 90 Petko Kováchev, en aquel entonces miembro de las Asociaciones Estudiantiles Independientes y de la organización no gubernamental ambientalista Ecoglastnost que, junto con otras diez organizaciones políticas de oposición al gobierno comunista integraba la Unión de Fuerzas Democráticas (UFD).
En el año 1990 los acontecimientos corrían como la pólvora y nada podía detenerlos: se disolvió el Consejo de Estado, el país se declaró en quiebra, se sucesieron tres gobiernos y la República Popular de Bulgaria pasó a llamarse República de Bulgaria. Sin embargo, la transición búlgara fue pacífica y negociada en una Mesa Redonda Nacional.
La oposición había propuesto consultas políticas ya en noviembre de 1989. En un principio, el gobernante Partido Socialista se negó a mantener conversaciones pero cambió su postura después del mitín de la oposición del 14 de diciembre, la huelga política iniciada por el sindicato Podkrepa (apoyo) y de los posteriores acontecimientos en la vecina Rumania. Entre el 3 de enero y el 15 de mayo de 1990, la Mesa Redonda Nacional celebró 19 sesiones, transmitidas en vivo en las ondas de Radio Nacional de Bulgaria. El archivo sonoro de esta Casa guarda un registro de la inauguración de la Mesa Redonda con la participación de Gueorgui Pírinski, del Partido Socialista Búlgaro (PSB), ex presidente de la Asamblea Nacional de Bulgaria (2005-2009), y de Zhelyu Zhélev, primer presidente del país (1990–1997) electo democráticamente, de la UFD.
“La misión histórica de la Mesa Redonda Nacional es lograr acuerdos concretos que sirvan como base para resolver los problemas políticos y socio-económicos más importantes del país –señalaba Gueorgui Pírinski– . Estos problemas están relacionados principalmente con las vías, las etapas y los plazos para la abolición de las estructuras totalitarias rechazadas por la vida y para la democratización de la sociedad, el establecimiento de las ideas y principios básicos de proyectos de leyes y demás actos normativos que garanticen pasos rápidos y decisivos para lograr los objetivos nacionales. La Mesa Redonda Nacional puede cumplir con este papel excepcional y con su estatuto sólo en las condiciones de confianza mutua, espíritu constructivo y responsabilidad”.
He aquí una parte de la intervención de Zhelyu Zhélev:
“Después de revisar de nuevo el texto elaborado por el grupo de contacto, nos parece que en algunos aspectos no es lo suficientemente categórico. Aquellos puntos que deberían ser terminantes suenan como sugerencias. Seguimos pensando que debe haber por lo menos una frase que señale de forma clara cuáles son el estatuto y las competencias de la Mesa Redonda”.
La Mesa Redonda se centraba en el marco político de cambios y casi no discutía la reforma económica y el cambio de propiedad, y en esto reside su defecto. Los principales logros de la Mesa Redonda Nacional son la derogación del Artículo 1 de la Constitución, referente al papel dirigente del Partido Comunista, la introducción de la institución Presidencial, la despolitización del Ejército, la Policía, los tribunales y la diplomacia, la convocación de elecciones a una Gran Asamblea Nacional y la disolución del Sexto Departamento del Comité de Seguridad del Estado, que combatía las diversiones ideológicas y las actividades antiestatales. El 12 de marzo de 1990, en la Mesa Redonda Nacional fueron firmados tres acuerdos: sobre el papel y el estatuto de la Mesa Redonda, sobre el sistema político y el desarrollo pacífico de la transición.
El 7 de junio de 1990 la UFD reunió en su mitin electoral a más de un millón de personas impulsadas por la esperanza de que los cambios en el país traerían una vida mejor. El 10 de junio de 1990 se celebraron las primeras elecciones libres después de 1944, año en que Bulgaria emprendió el camino de la construcción socialista hacia el comunismo. El PSB ganó las elecciones obteniendo 211 de los 400 escaños en la Gran Asamblea Nacional. La reacción a los resultados electorales no se hizo esperar. Los simpatizantes de la UFD, seguros de que se trataba de una manipulación de los resultados (cosa comprobada en 1997 por la Fiscalía General), iniciaron protestas masivas levantando barricadas en los bulevares. El 4 de julio comenzó una protesta sentada que se convirtió en un campamento de carpas conocido como La Ciudad de la Verdad; los manifestantes instaban al PSB reconocer la falsificación de los resultados de las elecciones y declarar sus posesiones. Insistían, además, en que se fijara una fecha para el juicio contra el ex líder comunista Tódor Zhívkov. El 6 de julio, Pétar Mladénov, ministro de Exteriores durante el antiguo régimen, dimitió como presidente de Bulgaria tras el escándalo que provocó su frase “Es mejor que vengan los tanques”. La causa de ella fue el bloqueo de la Asamblea Nacional por una manifestación espontánea el 14 de diciembre de 1989.
Durante el verano de 1990 la Asamblea Nacional tomó la decisión de que fueran desmontados los símbolos del poder comunista. El PSB consintió quitar la estrella roja de cinco puntas que coronaba el edificio de la Casa del Partido pero deliberadamente no lo hacía. El 26 de agosto, durante la protesta de turno contra la dilación del desmontaje, la Casa del Partido fue incendiada. De este acto fue acusado el grupo de protesta Ciudad de la Verdad, lo cual dio motivo a la policía para desmantelar el campamento, aunque la verdad sobre el incendio fue otra. Del documental Cerrado por prescripción, de la directora Malina Petrova, se desprende que la Casa del Partido fue incendiada precisamente con el propósito de desacreditar a la Ciudad de la Verdad. Sigue siendo un misterio hasta la actualidad si los documentos que se guardaban en aquel edificio fueron pasto de las llamas o fueron sacados con anterioridad y ocultados de la sociedad búlgara. Es un hecho que a día de hoy nadie sabe lo que está escrito en esos papeles; probablemente su contenido revelaría información desagradable sobre las personas que estuvieron en el poder antes de 1989.
En esta atmósfera la Gran Asamblea Nacional escribió y votó la nueva Constitución de Bulgaria, aprobada el 12 de julio de 1991a pesar de la protesta en su contra.
Versión en español por Daniela Radíchkova
“No me gusta la palabra leyenda, soy una persona real y un artista. Pero si me piden decir algo en este contexto, será lo siguiente: se me ha reconocido como el mejor bajo cantabile en el mundo”. Eso decía en una de sus últimas entrevistas el..
El año 2013 se ha quedado en la historia más reciente de Bulgaria como año de las protestas. Forzado por éstas tuvo que abandonar el poder en febrero de ese año el primer gobierno del partido GERB, presidido por Boyko Borisov, y el gobierno..
“Era el pianista más bello de su tiempo; elegante, orgulloso e inalcanzable, como si hubiera nacido en frac en 1929 en Sofía”. Así el diario berlinés Die Welt describía a Alexis Weissenberg. El excepcional pianista, nacido en la capital de Bulgaria en..