El Presupuesto es Presupuesto para poder ser actualizado. Esta es la ley “divina “a que tiene que atenerse cada ministro a finales del año. Lo es para cada ministro, excepto para uno, el de Finanzas. Es que para el titular de Hacienda cumplir el Presupuesto consolidado es la meta de las metas. Todo debe cuadrar hasta los ceros, no hay cosa mejor que esto para un ministro de Finanzas, pero ello estorba al resto de sus colegas en determinado gabinete. Cada uno de ellos quiere, a finales de año remendar tal o cual agujero en el presupuesto de su respectivo departamento. En esto no ha habido excepción tampoco en 2015 y así lo ha manifestado,  con amargura, el ministro de Finanzas, Vladislav  Goranov.

La actualización del Presupuesto 2015 se hace con más de 440 millones de euros para sufragar gastos imprevistos en personal de los ministerios del Interior y de Defensa como también  en las plantillas de otras entidades y en financiar proyectos europeos a través del Fondo Nacional y el deAgricultura. La supuesta actualización supera en 25 millones de euros  el esperado cumplimiento de la recaudación fiscal, del orden de 416 millones de euros y esto trasciende del pronóstico presupuestario actualizado. Ciento ochenta y cinco millones de euros se encauzarán complementariamente a los presupuestos del Ministerio del Interior y el de Defensa para sufragar gastos imprevistos en plantilla y, básicamente, en pagar indemnizaciones. La suma más cuantiosa, de 90 millones, se dirigirá al Ministerio del Interior  y de ella 60 millones servirán para pagar al personal y 30 millones, para el mantenimiento. Se prevé incrementar los recursos para salarios y cotizaciones a la seguridad social y sanitaria hasta los 40 millones de euros, incluyéndose en esta cifra el pago por el trabajo extra efectuado en las operaciones policiales especializadas para contener la presión migratoria y en las tareas relacionadas con la protección del orden público y la seguridad ciudadana en el territorio del país. Se prevén además, 20 millones de euros para pagar indemnizaciones a  funcionarios policiales jubilados. A comienzos de octubr,e Rumiana Bachvarova, ministra del Interior, reclamó para el pago de tales indemnizaciones, una actualización del Presupuesto  del orden de 11 millones de euros. Sin embargo, el ministro de Finanzas Goranov expresó que no concedería la cuantía por las reformas que el ministerio no acababa de efectuar. Luego, amenazó con reformar el Ministerio del Interior por medio del Presupuesto para 2016. Ahora, sin embargo, se otorga el doble de los recursos solicitados, ya que se estima que, hasta finales del año, los gastos en este rubro abultarán. Los gastos complementarios indispensables para el mantenimiento del Ministerio del Interior ascienden a 30 millones de euros en total de los cuales 20 millones son deuda contraídas con suministradores de corriente eléctrica y térmica, combustibles, lubricantes, agua, telecomunicaciones, servicios de correos, peritajes, servicios de asesoría, etc. El Ministerio de Defensa aparece como “más modesto”, ya que recibirán en forma complementaria 29 millones de euros, de los cuales 24 se destinarán al personal, y los 4 restantes a mantenimiento. Además de recursos para sueldos e indemnizaciones, el Ministerio necesita sumas adicionales para piezas de repuesto y equipamiento con material bélico.

Al Fondo de Agricultura se encauzarán en forma complementaria 185 millones de euros. En los motivos se señala que “los recursos son indispensables para refinanciar gastos en el marco de los programas y fondos europeos y para complementaria cofinanciación nacional”. La conclusión de los proyectos del antiguo período programado, por un lado, no provocará una pérdida de la financiación europea, y, por el otro, no traerá la necesidad de comprometer recursos nacionales adicionales para finalizar la ejecución de los proyectos en los próximos años. Dicho en forma resumida, estosignifica que el dinero no será perdido para el fisco sino que se implementará conforme las reglas europeas.

Se queda, empero, la amargura de que el supuesto mejor cumplimiento de la recaudación para el erario público no se ha traducido, por ejemplo, en una reducción del déficit público, sino que el dinero ha ido a parar a sectores no reformados.

Versión en español por Mijail Mijailov