Las obras de Dimitar Taushanski son abigarradas y de gran número de sustratos como la vida misma, y constituyen una franqueza en la que cada cual puede descubrir a sí mismo. Son optimistas o tristes, irradian humildad y osadía, recrean la hermosura de la intimidad humana, la soledad en medio de la muchedumbre, la vida con máscara, la esencia desnuda del ser, los hilos que unen al ser humano con la época moderna, con el pasado, con los mitos y las leyendas. Mueven a la reflexión y a la reconsideración del mundo circundante.
Soy una persona exclusivamente autodidacta, no tengo formación artística, reconoce Taushanski. Sin embargo es esto precisamente lo que me ayuda a moverme distanciado de los clichés. Hay gente que en su vida toda sólo se ocupa de una misma cosa, y esto yo no lo puedo hacer. Cada día voy buscando una forma nueva, un nuevo método que me permitan crear, hasta con el mismo material, algo distinto. La imaginación no deja de funcionar, confiesa Taushanski.
Así sus talentosas manos van creando grabados, obras pictóricas, esculturas, caricaturas. Combina, de manera magistral, diferentes estilos. Ha ejercido de dibujante y pintor en el cine, en el teatro, de cartelista. No hay día en que no trabaje. Dice la gente: si tienes talento todo te sale estupendamente. Esto no es cierto, es que hay trabajo y cuando trabajaste salen bien las cosas, asegura Taushanski. Respecto a su trabajo refiere lo siguiente:
Soy un hombre polifacético. Hago grabados hasta llegar a un determinado nivel. Luego acometo la pintura. Lo puedo hacer en un mismo día y, al siguiente, dedicarme a la escultura. Es que se produce una saturación y así me detengo por un instante, luego vuelvo a lo que había comenzado. Uno no puede hacer las cosas únicamente en blanco y negro. El grabado es algo increíble, denota la maestría del artista. Es le medida que te enseña si tienen mano de dibujante y pintor. Cuando se tiene pintura se puede ocultar alguna cosa. Puedes esconder algo si no pintas bien. El grabado, sin embargo, es distinto. Es como en la escultura, en la que tienes que sugerir algo con la piedra, el metal, la arcilla. También he hecho tallados en madera, muy arduos de elaborar, como lo es también labrar la piedra. En esta labor no hay cabida para los errores. Es que no puedes hacer correcciones, pegar algo. Los cinceles me los fabrico yo mismo, me los invento. Antes de acometer mi trabajo ya lo tengo todo pensado de cómo será. En ocasiones confecciono modelos en arcilla para ver qué tala será la obra.
Admira a Miguel Ángel por la maestría con la que creara sus pétreas esculturas. Es sufrimiento y admiración. Él simplemente está en el Olimpo. De ahí todo ya va descendiendo, cree Taushanski. En sus obras se siente influenciado por los lienzos de Picasso, Van Gogh, Rubens, Delacroix, entre otros artistas del pincel.
Al comienzo manejas un criterios, luego vas sumando otros, explica Taushanski. Sus obras nacen de la vida misma, reflejan las cosas con que va topándose en su camino, cosas que analiza y recrea a través de su prisma propio personal. Dice, refiriéndose al tiempo que le lleva crear un cuadro:
Depende del estado de ánimo, del humor. A veces lo consigo a primera vista y me sale óptimamente. En ocasiones el cuadro va sufriendo y lo dejo descansar un rato, descansando éste de mí y también yo de él. Al pasar una semana le doy una vuelta, recomienzo y ya me sale bien. Es que en el primer momento uno ve una cosa y luego, tras hacer una análisis, ve otra cosa completamente diferentes.
El comienzo del camino de Dimitar Taushanski al arte fue marcado por un 2, nota equivalente a un suspenso en la calificación escolar en Bulgaria, que sacó en las clases de dibujo en 3º o 4º de la primaria. Había pintado un cuadro otoñal, en colores, con pintura de agua, y al maestro me puso la peor nota. Yo, sin embargo, era muy observador de las cosas, que luego repensaba. Me agradaba ver imágenes, ilustraciones hechas por Boris Anguelushev, por los viejos maestros. Iba a las bibliotecas, no dejaba de buscar y siempre sentía admiración por cómo los artistas, de un amago, con varios trazos habían sido capaces de recrear la vida, recuerda el artista. Actualmente obras suyas son posesión de coleccionistas de Bulgaria, EE.UU., Alemania, Gran Bretaña. En el año 2017 en los EE.UU. fue publicado un libro, dedicado a la obra de Dimitar Taushanski, escrito por la profesora Lolita Nikolova.
Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: archivo personal
Cantantes de ópera búlgaros salen en el mismo escenario para rendir homenaje a Boris Hristov en el 110 aniversario de su nacimiento. Recreando papeles emblemáticos para el gran bajo y con una dosis de humor artísticonos recordarán sus triunfos..
La décima edición del Festival Internacional de Cine y Literatura Cinelibri se inaugura hoy con una ceremonia en la Sala 1 del Palacio Nacional de Cultura. El lema del evento este año es "Poesía sin fin". La apertura será marcada por la proyección de la..
Uno de los lugares más curiosos y coloridos de cualquier ciudad es su mercado. Ya sea un evento diario o que tenga lugar un día específico de la semana, ya ofrezca productos comunes o especializados, el mercado es un fenómeno cultural que ha..