El Partido Socialista Búlgaro (BSP) ha suspendido las conversaciones con Continuamos con el Cambio sobre la formación de un nuevo gabinete debido a la decisión del primer ministro dimitido, Kíril Petkov, de expulsar a setenta diplomáticos rusos.
“Esta desición está en el umbral de una ruptura sin precedentes de las relaciones diplomáticas con Rusia”, ha declarado la lideresa socialista, Kornelia Nínova, al cabo de una reunión del Buró Ejecutivo del partido. En palabras de Nínova, se trataba de una decisión que no había sido estudiada por el Consejo de Ministros sino que había sido tomada de manera unipersonal. Sin embargo, el dimitido ministro de Deportes, Radostín Vasilev, ha afirmado que el Gabinete había discutido el caso con los diplomáticos rusos a puerta cerrada y los ministros de la cuota del BSP habían reaccionado de forma negativa.
La lideresa socialista ha insistido en que la Asamblea Nacional escuche en una sesión a puerta cerrada al jefe de la Agencia Estatal de Seguridad Nacional sobre este mismo tema, y que el jefe de Estado convoque al Consejo Consultor de Seguridad Nacional.
Kornelia Nínova ha sido contundente de que la izquierda volvería a sentarse a la mesa de negociaciones sobre la formación de un nuevo gobierno solo si el CC abandona su intención de nominar a Kíril Petkov a primer ministro.“La decisión del BSP de suspender las negociaciones sobre un nuevo gabinete será tratada en una reunión del grupo parlamentario del CC”, ha comunicado su presidente, Andrey Guiurov, quien ha instado a la izquierda a reconsiderar su reacción. Además, ha comentado que el CC hará todo lo posible por formar un gobierno cuando reciba el primer mandato exploratorio.
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