Rusia ha decidido dejar de suministrar piezas de repuesto para equipos militares a países considerados hostiles, entre los que se incluye Bulgaria. Además, se revocarán las licencias de reparación de equipos militares de fabricación ruso-soviética. Esta decisión, que afecta particularmente al material de aviación, se toma como respuesta a la transferencia de material militar ruso y soviético a Ucrania. Así lo anunció hoy Dmitry Shugaev, jefe del Servicio Federal de Cooperación Técnico-Militar de Rusia, durante el foro Ejército-2023.

En sus declaraciones a los periodistas, el ministro de Defensa, Todor Tagarev, señaló que hay casos aislados en los que empresas búlgaras operan bajo estas licencias. En tales situaciones, las empresas están buscando fuentes alternativas de conocimiento técnico, explicó Tagarev. Afirmó que Rusia tiene demandas mucho más amplias que el gobierno búlgaro no reconoce ni reconocerá.

El ministro también aseguró que se está llevando a cabo un análisis constante de los riesgos para la seguridad en el Mar Negro y que se están debatiendo diversas opciones de acción. Los comentarios de Tagarev surgieron a raíz del incidente en el que se dispararon advertencias a un buque comercial en el Mar Negro, cerca de la zona económica búlgara. Según la información proporcionada por Tagarev, el buque ya ha llegado a su destino.