El Partido Socialista Búlgaro (BSP) insiste en que las instalaciones de la central nuclear de Belene no se deben vender a Ucrania. El grupo parlamentario de la izquierda presentó a la Asamblea Nacional un proyecto de decisión en el que se insiste en congelar las negociaciones entre Bulgaria y Ucrania hasta que se determine si parte del equipamiento puede utilizarse para las necesidades de la planta nuclear de Kozloduy.

El vicepresidente del grupo parlamentario, Dragomir Stoynev, dijo a Radio Nacional de Bulgaria que hasta el momento hay dos expertisis de la Compañía Nacional de Energía que demuestran que el equipamiento de la central nuclear de Belene es compatible. Según el BSP, para decidir si el equipo realmente se puede utilizar para las necesidades de la central nuclear de Kozloduy es necesaria la evaluación de los especialistas y también del Organismo Internacional de Energía Atómica.

Stoynev subrayó que en se trata de una cuestión de política estatal en materia de energía.