El misterioso dron que realizaba maniobras aleatorias en el aeropuerto de Sofía el 7 de febrero y que provocó retrasos de seis vuelos, fue hackeado, manipulado y no fue accidental. Los drones de gran tamaño como el utilizado son de tipo militar, utilizados para espionaje y vigilancia, comentó a BNT el director de la Policía de Fronteras, Anton Zlatanov.

"El dron, que había sido vendido por una empresa autorizada, no podía sobrevolar el aeropuerto, ya que la zona está prohibida. Esto indica que el dron ha sido manipulado y que se trata de una acción intencionada", afirmó Zlatanov.

Al parecer el dron fue hackeado. Así lo reconoció a los medios también el presidente de la Asociación de la Industria de Aviación de Bulgaria, Todor Ivandzhikov. "En la mayoría de los drones, el aeropuerto está configurado como zona prohibida en su software. Este dron está claramente hackeado o ensamblado especialmente, y el software le permite ir a cualquier parte", comentó el experto.