En primera lectura, el Parlamento aprobó tres proyectos de enmienda al Código de la Familia. La propuesta del grupo parlamentario GERB-CDC plantea introducir la posibilidad de custodia compartida en casos de divorcio, así como incluir en la decisión judicial la cuestión de los viajes del menor al extranjero. Por su parte, el partido Renacimiento propone garantizar la igualdad de trato entre ambos progenitores en la disolución del matrimonio, en lo que respecta a la atribución de los derechos parentales. El proyecto del partido Hay Tal Nación establece un periodo mínimo de cuatro meses al año para que uno de los progenitores pase tiempo con su hijo.

En la práctica, casi la mitad de los matrimonios en Bulgaria terminan en divorcio, lo que pone en situación vulnerable a un número significativo de menores. En el país hay al menos 350 000 madres que crían solas a sus hijos, y muchas de ellas no reciben pensión alimenticia.

Los nuevos textos propuestos por GERB-CDC eliminan la posibilidad actual de que, durante el procedimiento de divorcio, los padres puedan tomar decisiones de forma conjunta sobre todos los aspectos relacionados con la crianza y educación de los hijos menores. Uno de los temas clave de debate en los tres proyectos es si el tribunal podrá imponer la custodia compartida a ambos progenitores, incluso en caso de desacuerdo entre ellos.