La cosecha de rosas de este año comienza con serios problemas debido al prolongado frío, informa BGNES.

Los trabajadores de este negocio pronostican una cosecha extremadamente mala. Esto plantea graves preocupaciones financieras, ya que los costes de cultivo de rosas no pueden cubrirse con los precios actuales de compra.

En nuestro país hay alrededor de 6.200 hectáreas de plantaciones de rosas de las cuales se extrae aceite, pero sólo 4.000 de éstas se cultivan activamente. Las áreas restantes no se mantienen o están abandonadas debido a la baja rentabilidad del sector.

Los productores de rosas exigen un apoyo estatal adecuado y una revisión de los precios de compra, ya que de lo contrario podría desaparecer el sustento tradicional de regiones enteras.

Redactora: Diana Tsankova

Traducido y publicado por Vladislav Púnchev

Fotos: BGNES