La lucha contra el sector sumergido está directamente relacionada con el control de la explotación laboral y con la protección de los derechos humanos, afirmó el ministro de Asuntos Sociales, Borislav Gutsanov, en la inauguración de la conferencia internacional “Mejora de la cooperación: desarrollo de enfoques transfronterizos para combatir la explotación laboral”.

El ministro destacó que no es casualidad que el Gobierno haya declarado la guerra a la economía sumergida. “No toleraremos bajo ningún concepto el trabajo sin contrato laboral porque esto abre la puerta a la explotación laboral y al tráfico de personas, y a menudo también a la explotación sexual”, añadió Gutsanov.

Durante los primeros nueve meses del año, la Inspección General de Trabajo ha realizado alrededor de 38.000 inspecciones y ha detectado cerca de 2800 casos de trabajo sin contrato laboral. Las sanciones impuestas ascienden a más de 11 millones de leva. Además, los ingresos por cotizaciones a la seguridad social han aumentado en 1700 millones de leva, lo que indica una disminución del sector sumergido y de los riesgos de explotación asociados al mismo, informa la BTA.

Redactor: Diana Tsankova

Traducción en español y publicación: A. Markova

Foto: BTA