Verano. Hace calor y la sola mención de Guinness despierta asociaciones de sed y deseos de la divina, espumosa, oscura y tibia cerveza con este nombre. Pero en este día final de agosto para los búlgaros el nombre de esta famosa cerveza se suele asociar al aniversario redondo que acaba de cumplir el Libro Guinness de los Récords.

La idea para la publicación del libro se le ocurrió a sir Hugh Beaver, gerente de la fábrica de cerveza “Guinness”.Hace 60 años , el 27 de agosto de 1955 veía la luz la primera edición de este libro de los récords y se transformaba inmediatamente en el libro mejor vendido en Gran Bretaña. Incluso hoy en día, tras la Biblia, El Corán y las Citas del Gran Timonel Mao Zedong, el Libro Guinness de los Récords sigue siendo el libro más editado en el mundo con derechos de autor protegidos. La colección, a través de los años, ha recogido no sólo las plusmarcas más grandes del ser humano sino también curiosidades recordistas de la naturaleza.

Este anuario de los récords vio la luz en Bulgaria, en lengua búlgara, apenas en 1999, mientras en años anteriores se importaba la edición en lengua rusa. El libro ha recogido, asimismo, gran número de nombres búlgaros buena parte de los cuales hemos encontrado en el apartado de Deportes. Los búlgaros acostumbramos mencionar con el máximo grado de entusiasmo el récord mundial en el salto de altura. Lo registró la atleta búlgara Stefka Kostadinova y desde hace ya 28 años esta plusmarca no ha sido superada. El 30 de agosto de 1987 en el Campeonato Mundial de Atletismo en Roma Kostadinova superó la altura de 209 centímetros. La atleta, nacida en Plovdiv, segunda mayor ciudad de Bulgaria, obtuvo asimismo el título olímpico en los JJOO de Atlanta en 1996 y ostenta en su palmarés cinco títulos mundiales en competiciones al aire libre más otros tantos en sala.

El legendario yachtsman, capitán Gueorgui Gueorguiev es el primer yachtsman búlgaro que hizo para Bulgaria la primera vuelta al mundo a bordo de su yate. Zarpó a bordo de su yate Cor Caroli del muelle de La habana el 20 de diciembre de 1970 y al año siguiente, siempre el día 20 de diciembre atracaba en el mismo puerto. Lo curioso en su caso concreto es que fue el único navegante en el mundo que consiguió cruzar, en la temporada de las tempestades, las llamadas Grandes Depresiones tropicales en el Pacífico en la zona de las islas Fiyi.

Se consideraba hasta aquel momento que tal periplo excedía de las facultades humanas y de las prestaciones técnicas de un velero. Sin embargo, el capitán Gueorguiev sí lo consiguió sin recurrir en ningún momento a la asistencia ajena aunque realmente la hubiera necesitado. En ningún momento emitió una señal de desastre. Recorrió navegando 23018 millas náuticas, en solitario. Durante toda la travesía sólo le hacía compañía un pequeño gatito. El balandrista número Uno de Bulgaria de todos los tiempos fue inscrito en el anuario del Guinness para 1981-1982. Su adelanto constituyó para su época un récord único en su género.

El mayor número de búlgaros recordistas figuran en el arte circense. La troupe de los Kejayov, varias generaciones de legendarios artistas circenses búlgaros, fueron acumulando récord tras récord. Encontraron su puesto en el Libro Guinness ya en 1978 cuando el mundo retuvo su respiración ante el espectacular salto mortal ejecutado por una columna de siete personas. Despina Kejayova consiguió hacer rodar alrededor de su cintura 75 aros simultáneamente y así también registró un récord. El representante de más corta edad de Los Kejayov, Maximus García, de 5 años de edad, entró en el Libro de los Récords como el motorista más joven que hacía loopings a una velocidad de casi 70 kilómetros dentro del Globo de la Muerte.

No podríamos omitir tampoco el logro del ajedrecista Kiril Gueorguiev quien se enfrentó a 360 contendientes en forma simultánea triunfó frente a 280 de ellos, consiguió tablas frente a 74 de ellos y sólo fue derrotado por seis. Gueorgui Gueorguiev, guitarrista estuvo tocando en su instrumentos por espacio de 49 horas batiendo el récord de otro búlgaro, Biser Rachev. Dos mil catorce cócteles preparo en tiempo récord el cantinero Pencho Penchev quien ya tiene en su haber 4 récords, de los cuales el más reciente está recogido en la edición 2014 del Libro Guinness de los Récords.

En 2005 11 961 personas bailaron una ronda típica búlgara, joró y destronaron el récord por participaciones masivas. Desgraciadamente, un año después, en una aldea rumana bailaron una ronde un número mayor de participantes y así nos arrebataron el récord a nosotros. En cambio, hay que decir que Bulgaria es el primer país que registró un récord con la interpretación simultánea de un número enorme de gaiteros. El 16 de mayo de 2012 en el palacio Nacional de Cultura en Sofía se produjo la actuación simultánea de 333 gaiteros. Ni siquiera los escoceses parecen capaces de reunir a tantas gaitas en un lugar ¿verdad?

Bulgaria tiene también otro récord estremecedor recogido en el apartado de Religión del Libro Guinness. Se trata dela estatua de la Virgen María con el Niño Jesús, en la ciudad de Jáskovo, considerada, por sus32 metros de altura, la estatua más alta de la Madre de Dios a nivel mundial. La Santísima Virgen es patrona de esa meridional ciudad búlgara. El monumento fue desvelado el 8 de septiembre de2003 y fue recogido por el Libro Guinness de los Récords en 2005.

Versión en español por Mijail Mijailov