Los niños nacidos después de 2000, la llamada Generación Z, crecen en un época en la que la realidad virtual está a menos de una palma de distancia y la Internet se ha convertido en necesidad y en la sombra de cada uno de nosotros. No obstante, toda moneda tiene dos caras. Además de las comodidades que suponen, las tecnologías modernas (como, por ejemplo, el acceso con la velocidad de un rayo a la información), también esconden peligros para los adolescentes. Para eludirlos, los niños y sus padres y profesores deben tener cultura digital. A la tarea de formarla se ha dedicado el equipo de la iniciativa DigitalKidz.
Para Ivelina Atanásova, presidenta de la Fundación "Los niños digitales" y creadora de DigitalKidz, es importante que los adultos mejoren sus habilidades y competencias tecnológicas para entender la naturaleza de las tecnologías, y también estar conscientes del peligro que conllevan, y estar preparados y eficaces a la hora de enseñar a sus hijos cómo usarlas adecuadamente.
Enseñamos a nuestros hijos a no meter los dedos en el enchufe y no jugar con objetos cortantes o que tengan puntas pero no nos damos cuenta de que las tecnologías, que ellos aprenden a usar de forma intuitiva, no son una amenaza menor para su seguridad e identidad –dice Ivelina Atanásova– . Cuando no se utilizan con moderación pueden privar de humanidad al ser humano y reemplazar la comunicación, las relaciones y la empatía entre las personas con chateo por teléfono. Las estadísticas muestran que más de la mitad de los progenitores no conocen los programas de control, por consiguiente no saben qué es lo que hacen sus hijos en Internet, con quien se comunican, qué tipo de contenido consumen. Más del 80% de los niños de hoy en día empiezan a usar el Internet de forma activa antes de entrar en la pubertad. Uno de cada tres niños ha sido objeto de mensajes sexuales en la red, uno de cada seis ha sido objeto de acoso cibernético, que a menudo se convierte en acoso en la vida real. Enseñamos a nuestros hijos a no hablar con extraños en la calle pero no sabemos cómo ayudarlos a protegerse cuando se trata de comunicación y consumo de contenidos en la Red Global.
Según Ivelina Atanásova el creciente número de profesores de edad avanzada en el país son un desafío ante la cultura digital.
Cuando se niegan a superarse tecnológicamente, cambiar la metodología de enseñar y comprender que los niños de hoy piensan y perciben el mundo de otra manera, la comunicación entre los niños y los maestros se vuelve ineficaz –explica– . Los niños modernos están orientados visualmente. Para percibir la información y aprender algo nuevo necesitan usar sus sentidos o sea tocar las cosas y vivirlas. Las tecnologías cambian no sólo la forma de entretenernos, sino también la forma en que percibimos el mundo y en que aprendemos y comunicamos unos con otros. Eso influye en gran medida en la forma en que debe ser enseñado el material escolar, aunque todavía no se concibe como un problema y necesidad.
Mantenerse ante el televisor o la computadora largo tiempo puede conducir a la inmovilidad y disminuir la actividad en los niños. Ivelina Atanásova aconseja:
Los padres deben estar preparados de cómo estimular la actividad física en su hijo. Eso no significa necesariamente que inscriban a sus hijos a practicar algún deporte. Hay muchas actividades y juegos que podrían convertirse en parte de la vida cotidiana y la educación; algún esfuerzo natural que no un extra que requiere tiempo, gastos y energía. Las tecnologías también pueden quitar la creatividad y la inventiva. Sin embargo, pueden ser perjudiciales para los niños sólo y únicamente si los adultos no se esfuerzan en lograr el equilibrio. Para que los niños búlgaros sean preparados para las amenazas que asechan en la Red, primero sus padres tienen que estar preparados para ayudarles y apoyarles. Considero que antes de juzgar y de culpar a las tecnologías de todo lo que quitan, primero hay que preguntarnos qué es lo que realmente damos nosotros a nuestros hijos, y cómo los preparamos para que usen las tecnologías, beneficiándose de ellas.
Versión en español por Daniela Radíchkova
La última obra de azúcar de María Ozturk es una maqueta de la basílica san pedro en Roma y esto nos ha provocado a conversar con nuestra compatriota precisamente en los días festivos. Ella lleva varios años viviendo entre Bulgaria y Estambul y no deja..
Iván Stoyanov es un búlgaro de Besarabia. El equipo de Radio Bulgaria se reunió con él en el templo búlgaro san Sofronio de Vratsa donde fue preparado el podcast Puente de la fe dedicado a la comunidad ortodoxa búlgara en Lyon, en Francia. Iván,..
En el día de hoy todo el mundo cristiano celebra la Santa Resurrección de Cristo. Para los pueblos ortodoxos este es el día más venerado, la Festividad por excelencia, que alaba la victoria de la vida sobre la muerte. En Bulgaria lo llamamos Velíkden..
Hace 20 años en la escuela búlgara Danubio en Linz, Salzburgo y Welz había apenas 6 niños, mientras que hoy en las tres sucursales hay siete profesores..