En los días que preceden la fiesta de san Nicolás, 6 de diciembre, los pescadores en la costa norte búlgara del mar Negro disfrutan de una abundante redada, capturando con más frecuencia anchoa, Trachurus y salmonete de fango, informa la agencia búlgara de noticias BTA.
“Lo que nos queda por hacer es proporcionar las especias para la sopa festiva”, han manifestado representantes del grupo local de pescadores Shabla−Kavarna−Balchik.
Este otoño, la pesca mayor ha sido de anchoa, por lo que en solo un mes, su precio por kilogramo bajó de 8 a 3 euros. Sin embargo, según los pescadores, tampoco esta temporada los cardúmenes del bonito común llegaron al mar Negro, ya que esto sucede con un lapso de unos cuantos años.
A causa de las medidas sanitarias, la fiesta de san Nicolás no será multitudinaria y la mesa festiva tendrá lugar en casa en compañía de los familiares más cercanos. Mientras, los pescadores cruzan los dedos y piden a san Nicolás que proteja a las tripulaciones de más de 150 botes y una veintena de barcos pesqueros en la región de vientos y tormentas.
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