Ha nacido la nueva prole de las primeras parejas de pelícanos ceñudos que anidaron en marzo en la reserva natural de Srébarna, situada a 2 kilómetros al sur del río Danubio. Los pelícanos nacieron en las plataformas de madera especialmente construidas para ellos en la porción norte del humedal.
La preservación de la colonia del pelícano ceñudo está entre las prioridades de la reserva natural de Srébarna. En el marco de un proyecto ejecutado por la Inspectoría Regional de Preservación del Medio Ambiente y Aguas, durante las próximas semanas se ha previsto habilitar nuevos sitios que propicien la anidación de un mayor número de aves. Esto puede hacerse talando la caña común y construir plataformas de madera adicionales.
La reserva natural, próxima a la aldea de Srébarna, es parte de la ruta Vía Pontica de migración de aves entre Europa y África. Por las raras especies de aves que lo habitan, algunas de las cuales en peligro de extinción, el humedal está incluido en la lista de los sitios de patrimonio natural y cultural de la UNESCO.
En Srébarna anidan 221 especies de aves. La reserva natural es hábitat para 22 especies animales y plantas vulnerables o en de peligro de extinción descritas en la Lista Roja Europea de los animales y plantas en peligro de extinción a nivel mundial, así como de 149 especies de la flora y la fauna que figuran en el llamado Libro Rojo de Bulgaria. Sin embargo, la especie más valiosa en la reserva es la numerosa colonia de pelícanos ceñudos. La Península Balcánica es el único lugar del Viejo Contiene donde existen tales colonias.
Alrededor de la reserva natural ha sido habilitado un sendero ecológico con plataformas de observación y glorietas para descansar, así como un museo natural donde se puede apreciar la numerosa flora y fauna de la reserva natural de Srébarna.
Versión en español de Hristina Táseva
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