Hace seis décadas nació una leyenda, cuando por primera vez sobre las cimas del macizo de Ródope se elevó una música inaudita. El sonar simultáneo de cien gaitas kabá causó, literalmente, una explosión de admiración del público en la primera Feria de Competición de Canto Rozhen, y la orquesta Cien Gaitas Kabá, de reciente formación, fue proclamada El Prodigio del Ródope.
Corría el año 1961. El centenar de gaiteros de la ciudad de Smolan, reunidos por Apóstol Kisyov (1924–2007) para formar esta singular orquesta, calaron hondo en los corazones y la imaginación de decenas de miles de admiradores de la música tradicional búlgara, en este país y en el mundo.
Cuando las cien gaitas comienzan a sonar al unísono, la gente que las escucha se estremece y contiene su respiración, y el tiempo frena su marcha para poderlas escuchar. Era así al comienzo, y así sigue siendo hasta hoy en día.
La gaita es el instrumento emblemático del folclore búlgaro, y su variante, la gaita kabá, es un instrumento característico exclusivo de la zona del Ródope, constituyendo el cuadro sonoro del monte con sus crestas aplanadas y las vetustas y pétreas aldeas desperdigadas en sus pendientes. La palabra kabá es de origen turco y significa espeso, denso. En esta particularidad reside precisamente el embeleso que provoca el sonar de la gaita kabá. El instrumento posee una voz densa, profunda y noble, de tono bajo.
Las Cien Gaitas Kabá de Smolan llevan ya seis décadas sonando con voz unívoca, y los talentosos instrumentistas de la orquesta suelen alzarse con los primeros premios de festivales folclóricos y competiciones de actuación instrumental internacionales. No es casual que la orquesta haya quedado recogida por el Sistema Nacional de Tesoros Humanos Vivientes, como parte del Patrimonio Inmaterial de Bulgaria. La orquesta presume de un certificado de marca registrada y un sello de la Dirección Nacional de Patentes.
Figura entre los representantes más destacados de la orquesta Cien Gaitas Kabá el gaitero magistral Jristo Topchíev, de la ciudad de Smolan, quien saltó a la fama por haber manufacturado la gaita más grande y la más pequeña del mundo. La formación también cuenta con su relevo joven, encarnado por la orquesta infantil de gaiteros de la ciudad de Devin, fundada en 1956 por Apòstol Kisyov con el fin de promocionar la antigua gaita kabá.
Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos:100kabagaidi.com
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