Mañana comienza la competición más importante para los atletas con discapacidad de todo el mundo: los Juegos Paralímpicos de París 2024. Por cuarta vez Stela Eneva participará en el lanzamiento de disco para atletas con discapacidad enesteforo tan prestigioso.
Esta primavera, Eneva obtuvo una plaza para participar en los Juegos Paralímpicos de la capital francesa tras quedar sexta en el Campeonato Mundial de Atletismo para Personas con Discapacidad, celebrado en Kobe (Japón). De este modo, garantizó su participación en sus cuartos Juegos Paralímpicos, tras Atenas 2004, Pekín 2008, donde ganó la plata en disco, y Londres 2012, en los que se hizo con las medallas de plata en lanzamiento de disco y peso. Sin embargo, después Stela se retiró durante nueve años del podio deportivo. El motivo fue un escándalo de dopaje que la privó de sus derechos de competición durante cuatro años. A pesar de esto, el espíritu de la triple medallista de plata olímpica no se quebró. Lleva dentro la esencia de una ganadora, algo que no pasa desapercibido para los entrenadores y los medios de comunicación.
El primero en echarle una mano es el entrenador Gueorgui Sekelarov. A pesar de que a los 27 años mucha gente abandona el deporte, ella ni siquiera había comenzado su carrera competitiva. Ni la edad ni las dificultades físicas son capaces de desviar a Stela del camino de la victoria. Es raro ver en los Juegos Paralímpicos a atletas con discapacidades físicas tan graves. En su infancia, a Stela le amputaron ambas piernas debido a una malformación congénita. Hoy es un ejemplo de cómo el espíritu prevalece sobre la materia, y este es su mensaje como atleta tanto para las personas sin discapacidad como para las personas con discapacidad en Bulgaria.
Stela afirma que todo se lo debe al deporte: gracias a él ha madurado y adquirido hábitos.
"Por eso recomiendo a todo el mundo que haga deporte, no importa si quiere conseguir resultados profesionales o simplemente hacerlo por diversión", dice Stela Eneva y continúa:
"He sido ambiciosa desde niña y siempre quiero llegar hasta el final e intentarlo, aunque las cosas no funcionen. Mucha gente se dice a sí misma que podría haber hecho algo alguna vez, pero ni siquiera lo intentó. Por eso sigo al pie de la letra el principio de que hay que intentarlo todo y solo entonces decidir si dejarlo o no. Desde el principio me asignaron a esta clase entre discapacitados, en la que estaba muy desfavorecida porque había gente con una pierna amputada y otra sana, o con dos sanas pero arqueadas. Pasé por tres grupos, y el objetivo es encontrarte a ti mismo en el deporte, sentirte mejor y ser igual a los demás atletas. Tenemos longevidad en esta disciplina (lanzamiento de disco); mientras te sientas realizado, puedes lanzar hasta los 60 años. Pero hay que cumplir las normas, porque al igual que los atletas sin discapacidad, tenemos que ser admitidos en los Juegos Paralímpicos".
La preparación de Stela para los actuales Juegos Paralímpicos empezó casi como una broma, cuando fue al campo solo para probar su forma física. En la Academia de Deportes, se cruzó con Tony Velkov, un buen entrenador y atleta con larga experiencia. Así, durante un año y medio con entrenamientos diarios, Stela Eneva vuelve a estar en buena forma y lista para la competición.
"Lo que es diferente ahora es que cada vez hay más personas con discapacidad interesadas en participar en competiciones olímpicas. El deporte evoluciona y se hace más popular. Hay muchos espectadores que siguen las competiciones. Yo también quería participar en los Juegos Olímpicos de Tokio, pero la pandemia me lo impidió entonces. Tanto si una persona tiene una discapacidad como si está sana, todo el mundo es igual en el deporte, porque también hay muchas lesiones en personas sanas. También es cierto que el esfuerzo es mucho mayor para nosotros; el entrenamiento físico en general es más difícil. Al final, lo más importante es mantener la calma y creer en uno mismo. En el deporte, es importante no buscar solo los logros, sino también disfrutar de lo que haces".
Durante los Juegos Olímpicos de París, Stela Eneva apoyó espiritualmente a cada uno de los atletas búlgaros. Dice que la energía que cada uno de nosotros envía a los atletas es muy importante y les ayuda cuando suben al podio. "No puedes estar solo, siempre necesitas un equipo de gente contigo. Y una pequeña palabra, aunque solo sea un 'te quiero', puede levantarte el ánimo y hacerte conseguir grandes cosas", afirma Stela Eneva.
Por Guergana Mancheva
Traducido y publicado: Borislav Todorov
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