Vratsa y el distrito se han consolidado en los últimos años como el centro económico de la región noroccidental de Bulgaria. Según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística, que abarcan el año 2023, el distrito de Vratsa ocupa el tercer lugar nacional en términos de producto interior bruto per cápita, con 27 113 BGN por persona, superado únicamente por Sofía y Stara Zagora.

El 1 de junio, Vratsa y sus habitantes celebran la fiesta de la ciudad que tiene lugar en vísperas del día en que todo el país se inclina ante la hazaña de Hristo Botev y las persomas que murieron por la libertad y la independencia de Bulgaria: el 2 de junio. Por eso, la celebración de Vratsa forma parte de los tradicionales Días de Botev, que se organizan allí entre el 24 de mayo y el 2 de junio. En 2025 se cumplirán 149 años de la gesta de Botev y sus guerrilleros (chétnitsi).

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Las celebraciones del Día de Vratsa comienzan con una misa en memoria de Hristo Botev y su guerrilla en la Iglesia de la Santa Ascensión, seguida de una solemne reunión del Consejo Municipal, en la que se concederán el "Premio de Vratsa" y el título de "Ciudadano Honorario de Vratsa". A primera hora de la tarde hay una peregrinación al lugar donde perdió la vida el poeta-revolucionario, en los Balcanes de Vratsa, y al final del día hay un concierto solemne y fuegos artificiales.

Días antes de los actos oficiales, uno de los símbolos de la ciudad –el monumento a Hristo Botev– volvió a ocupar su "puesto", tras haber sido reparado. En marzo, el monumento fue desmontado para restaurarlo, para lo cual el Estado destinó 350 000 euros. "Por orgullo, por patriotismo, por emoción, por empatía, estamos muy contentos de que el monumento esté ahora con nosotros, listo, restaurado. Es uno de los símbolos de la ciudad, que faltaba desde hace mucho tiempo", dijeron los músicos a la corresponsal de BNR, Iva Antonova.