¿Son seguras las carreteras búlgaras? ¿Quién es el responsable del alarmante aumento de los accidentes de tráfico? Si nos atenemos a las estadísticas, desde principios de año se han producido 3.448 accidentes graves con 260 víctimas y 4.575 heridos. En tan solo 20 días, desde principios de julio, se han registrado 446 accidentes de tráfico graves, con 35 muertos y 600 heridos.
Según la ley, los conductores son los culpables por no tener en cuenta la situación de la carretera, mientras que según los conductores, las carreteras búlgaras crean las condiciones previas para los accidentes de tráfico. Además, se ha puesto en cuestión el control y la aplicación de la ley. Entre las quejas frecuentes de los conductores se encuentran la falta de señalización y el escaso mantenimiento de la red de carreteras, que no cumple con las normas europeas.
Miroslav Markov es un conductor internacional que lleva más de 20 años viviendo y trabajando en España. Cada vez que regresa a Bulgaria, constata con amargura la enorme diferencia en el mantenimiento de las carreteras entre Bulgaria y otros países europeos:
"En Bulgaria se conduce por intuición hasta que te metes en un agujero", comenta Miroslav Markov. “A menudo falta la barrera de contención y te metes directamente en lo que hace tiempo era una zanja. Y como las zanjas están rellenas, no hay filtraciones de agua, y de ahí viene la erosión del asfalto. Aquí no existe la mejora de las carreteras. Incluso antes de salir de Bulgaria, siempre estaba viajando por las carreteras de otros países y tenía observaciones. A modo de comparación, los rumanos, en cuanto entraron en la Unión Europea, asfaltaron sus carreteras en tres años. Hay marcas activas visibles por todas partes. Son pequeños rombos que se sienten con los neumáticos al pasar por encima”.
"Para el dinero que entra en nuestro pequeño país, las carreteras deberían ser mejores que las de Suiza hace mucho tiempo", señala Miroslav. "Hay corrupción por todas partes", continúa, "pero a pesar de ello, las carreteras están pulidas hasta el último detalle, a diferencia de Bulgaria, donde las construcciones se alargan durante años y los fondos siguen siendo insuficientes."
En relación a los accidentes de tráfico, Miroslav Markov afirma: "Si en España, por ejemplo, se detecta que un tramo de carretera es peligroso, se corrige inmediatamente." Él mismo cuenta que durante su estancia en España, solo una vez se encontró con un motorista accidentado, y lo denunció de inmediato, observando que la reacción de las autoridades se produjo en cuestión de minutos. "Por desgracia, en Bulgaria solo podemos desear una actuación tan adecuada, y no porque falte buena voluntad, sino porque los equipos de emergencia no son suficientes."
Miroslav también menciona la dificultad en el control en carretera debido a la drástica reducción de personal de la Agencia de Administración de Carreteras, que pasa el 70% de sus horas de trabajo viajando.
"Estamos por debajo del mínimo imprescindible en la Agencia Ejecutiva 'Administración del Automóvil', señala Alexandar Ivanov, inspector de la Dirección Regional de Plovdiv. En la Unión Europea hay un 4,5% de inspectores por cada 10,000 habitantes. Aquí somos solo el 0,05%, lo que está por debajo del mínimo sanitario de las normas europeas. Con los recortes que han hecho a lo largo del tiempo, nos están tratando como una administración y no como un organismo de inspección. Nos hemos quedado con una dirección de tres equipos que tienen que responsabilizarse de tres distritos. Les doy un ejemplo: Burgás, Sliven y Yambol forman una sola dirección con tres equipos de control de carreteras encargados de supervisar las empresas, los puntos de inspección técnica anual, las empresas de formación, los taxis, los autobuses y las estaciones de autobuses. Esto es extremadamente insuficiente. Además, nuestras normas internas están redactadas de tal manera que, aunque se observen infracciones, no se pueden tomar medidas, porque la tarea fijada impide desviarse de ella".
"Mientras las instituciones se pasen la pelota de los absurdos accidentes en las carreteras, la culpa siempre será de los conductores. Los que adelantan en tramos prohibidos y conducen como cazas en autopistas, poniendo en peligro la vida de los usuarios de la carretea, siguen estando por encima de la ley. Por eso se han comenzado a construir barreras de goma entre los carriles para limitar los choques frontales en los tramos con más accidentes".
Versión al español de Borislav Todorov
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